Quien se aprovecha de los silencios cómplices ,
Quien no ve más allá, de sus blancas narices.
Estará condenado, a ver, tarde o temprano
Sus anhelos y su vida, tras la verja del desprecio, de la injusticia
y de un olvido tan frío, como las afiladas cuchillas
a las que se niega a enfocar su mirada